El viernes fui a recoger mi Avión en el conce de Granada ( yo vivo en Vera Almería) todo contento, arreglo el papeleo, me informan de como funciona el makinón, que si techo, que si limitador, etc, salgo con ella y por supuesto alucino de ir en la cabina terraespacial, el paseito fue corto porque ya era de noche y no era plan con el niño pequeño de hacer ningún viaje, la dejamos en una cochera y soñando con el día siguiente para hacer 300 km de vuelta a casa.
Lo que son las cosas, el sábado me levante con una contractura en el cuello de dos pares de cojones, no podía moverme, fui a urgencias porque no podía ni entrar en la GE, inyección de valium y nolotil y por lo menos se alivió un poco, pero desde luego no estaba para conducir, así que fue mi mujer la que tuvo que tomar los mandos del aparato, yo no servia ni de copiloto, el niño le se relajó de tal forma que se pasó las casi tres horas de viaje durmiendo, y yo, pues os podeís imaginar, maldiciendo mi suerte, había pensado en ese momento las últimas dos semanas, y veía como disfrutaba mi mujer de la conducción, que si es mas suave que un turismo, que no tengo ganas de llegar a casa, que vaya compra que hemos hecho, que esto es un gustazo, que que maravilla de regulador de velocidad, y yo como un gilipollas, con el cuello tieso y sin poder siquiera mirarla.
Después de un masaje, o mejor dicho, una paliza de un osteópata ya me encuentro mucho mejor, la he cogido, pero solo trayectos cortos, y pensando en mañana que voy a visitar a la familia a Córdoba, 400 kms, que me voy a disfrutar como un enano.
Bueno, pues ya os contaré la experiencia de Córdoba, espero que no me pase nada de aquí a mañana que es el día de partida.
Felices fiestas a todos los amantes de la Espace, bueno, y a los demás, también.
