Petrolear el motor del coche con productos de esos que anuncian en los centros comerciale o con agua pulverizada a presión y solución jabonosa. Patina la correa y puede ocasionar averías graves. Es mejor llevarlo a un garaje profesional y que lo limpien ellos con productos específicos que no deterioran los materiales. Y si puede ser, hacerlo una sola vez en la vida del coche, por ejemplo, antes de revenderlo.